Es increíble la cantidad de veces que te pedirán en tu vida que entregues una presentación súper persuasiva, hiper efectiva, mega original y con un diseño ultra cuidado…. y para colmo con un plazo de dos horas o incluso menos. El breafing para tu informe suele ser «que sea un vídeo como ese tan facilito que hizo CocaCola» [que, por su puesto hizo una agencia reputadísima con un plazo de varios meses y un presupuesto millonario], o «que sea una chorradita de esas chulas que hay en Pinterest, que se hacen en tres patadas» [sí, se refiere a una de esas infografías interactivas que hace mashable que son una auténtica pasada].
Claro, tú te pones a pintar con un papel y un lápiz, llegas a una idea, le consultas a tu jefe a ver qué le parece lo que quieres hacer y te suelta: «¿pero por qué no lo haces con photoshop o con Windows Moviemaker?«. En ese momento, contienes tus ganas de convertirte en Dexter y descuartizarle con un sacapuntas y optas por hacerte un powerpoint chungo, con las imágenes prediseñadas de Microsoft o si ya te ha pasado unas cuantas veces, optas por hacer un prezi de esos chulos. Cuando terminas el trabajo te dan la enhorabuena, aunque te recuerdan que, aunque está muy bien, les hubiera gustado que la plantita que salía en la primera diapositiva de la ppt creciera y se convirtiera en un árbol, al más puro estilo de Walt Disney. Tú sabes que con un Premiere o un After effects y unas cuantas horas más, hubieras hecho algo mucho más digno, pero claro, los tiempos son los tiempos y cuando no hay, no hay.
Sí esto ya te ha pasado y estás hasta las narices, no te preocupes. Te propongo estas dos herramientas gratuitas con las que hacer vídeos e infografías chulísimas en muy poco tiempo y con un diseño gráfico genial.
Canva: la mejor herramienta gratuita para hacer infografías
Photoshop e Illustrator seguirán teniendo su público, sobre todo en entornos profesionales muy técnicos. Pero la realidad es que Canva, la mejor herramienta gratuita para hacer infografías, está democratizando el diseño. Su apuesta por la facilidad, la velocidad, la versatilidad y la integración de herramientas de IA no solo simplifica la vida a los creativos: también amplía el terreno de juego a quienes nunca se atrevieron a diseñar. Como decía Umberto Eco, “la herramienta condiciona el pensamiento”. Y Canva está cambiando la forma en la que pensamos (y ejecutamos) el diseño gráfico en la era digital.
Durante años, diseñar era cosa de valientes: capas, máscaras, trazados y comandos imposibles de memorizar. Adobe reinaba con puño de hierro en el terreno creativo, y solo unos pocos elegidos —armados con tiempo, paciencia y una buena tarjeta gráfica— podían sacar adelante una identidad visual o una landing con cierto decoro. Pero en esa galaxia tan técnica y cerrada, apareció Canva como quien se cuela en una reunión de arquitectos con una caja de LEGO bajo el brazo.
Y lo cierto es que muchos —desde diseñadores freelance hasta equipos de marketing de grandes empresas— se están pasando al lado fácil de la fuerza. Aquí van cinco razones que explican por qué Canva se ha convertido en el nuevo estándar del diseño gráfico, desplazando sin complejos a Photoshop e Illustrator.
1. Diseñar sin volverse loco (ni perder media mañana): la facilidad lo cambia todo
Canva no exige un máster para empezar. Su interfaz es limpia, intuitiva y está pensada para que cualquiera —con o sin formación en diseño— pueda crear piezas visuales profesionales en minutos. La curva de aprendizaje de Photoshop es un Himalaya en comparación. Aquí no hay herramientas ocultas ni menús enrevesados: eliges una plantilla, arrastras elementos, cambias colores y listo. En lugar de estudiar cómo se diseña, simplemente diseñas.
2. La velocidad es su superpoder: adaptar y compartir en segundos
Donde Illustrator necesita tiempo y precisión quirúrgica, Canva ofrece agilidad. Crear una presentación, un post para redes o un cartel para imprimir no lleva más de unos clics. Pero lo mejor es que todo se adapta automáticamente: cambias el formato y Canva recompone el diseño para que encaje en otro tamaño, ya sea un reel de Instagram o un banner para LinkedIn. Ideal para equipos de marketing y diseñadores que no quieren perder el tiempo repitiendo tareas mecánicas.
3. El vídeo ya no es territorio prohibido
Hasta hace poco, editar vídeo era como montar un cohete espacial: programas pesados, licencias caras y una curva de aprendizaje para valientes. Pero Canva ha hecho lo mismo que hizo con el diseño gráfico: ha simplificado el vídeo. Ahora puedes montar reels, vídeos para TikTok o presentaciones animadas directamente desde el navegador, con plantillas, transiciones y hasta música sin derechos. No es After Effects, pero tampoco lo necesita ser. Lo importante es la facilidad de uso y la rapidez para generar contenido que funciona.
4. La inteligencia artificial se pone al servicio del diseño
Lo que antes era un lujo de agencias o editores con mucha experiencia —como borrar fondos, modificar imágenes con precisión o reemplazar objetos— ahora está al alcance de cualquiera gracias a la IA de Canva. La herramienta detecta elementos visuales, identifica rostros, objetos y textos, y permite hacer retoques casi automáticos sin salir del editor. Un ejemplo claro de cómo la IA no sustituye al diseñador, sino que lo libera de tareas pesadas.
5. Mucho más que diseño: webs, calendarios y cualquier cosa que puedas imaginar
Montar una página web solía ser una odisea: contratar un diseñador, un desarrollador, elegir hosting, entender qué narices es un DNS… Canva se ha cargado todo eso de un plumazo. Con su constructor de sitios web, puedes diseñar una web funcional y atractiva como si estuvieras haciendo una presentación. Todo se basa en plantillas personalizables, elementos visuales arrastrables y la opción de publicar directamente sin depender de terceros.
¿Necesitas un portfolio, una página para un evento, una landing comercial? Lo haces en minutos. No es WordPress, ni lo pretende. Pero justo por eso funciona: elimina barreras, reduce el proceso a lo esencial y te da resultados visuales de nivel profesional sin dolores de cabeza.
6. Los calendarios nunca fueron tan fáciles (ni tan tuyos)
Puede parecer un detalle menor, pero la creación de calendarios personalizados es otra función en la que Canva demuestra su filosofía: dar poder creativo sin complicaciones. Desde su apartado de calendarios, puedes diseñar desde cero o partir de plantillas editables para montar calendarios mensuales, anuales, corporativos o personales.
Le metes tus fotos, tus colores, tus fechas importantes, y en un par de clics tienes algo que parece salido de una imprenta profesional. Ideal para empresas que quieren regalar algo útil y bonito, o para particulares que simplemente quieren colgar en la pared algo más personal que el típico calendario del banco.
Powtoon: genial aplicación gratis para hacer vídeos con infografías
Si la anterior herramienta te parece útil, esta te va a chiflar. Powtoon es la aplicación web más sencilla e intuitiva que he visto jamás para hacer vídeos online. Powtoon ha convertido la creación de vídeos en algo tan sencillo como escribir un párrafo. Lo que antes requería un software complejo y horas de edición, ahora se resuelve en minutos. Su interfaz está diseñada para no abrumar: arrastras, sueltas, eliges estilos, animaciones, y en pocos clics tienes una presentación animada o un vídeo explicativo con aspecto profesional. Es una herramienta especialmente útil para equipos de marketing, formación y comunicación interna que necesitan generar contenido visual sin depender de un editor de vídeo profesional.
Pero lo que realmente ha cambiado las reglas del juego es su integración de inteligencia artificial para generar vídeos a partir de texto. Basta con escribir un guion o una idea básica y la IA se encarga de generar automáticamente una estructura narrativa, seleccionar estilos visuales y añadir animaciones y voz en off si se quiere. No hablamos solo de automatización, sino de un sistema que entiende el contenido y lo traduce en algo visualmente atractivo y coherente. Es como tener un pequeño estudio de animación en el navegador.
Además, Powtoon ofrece opciones de personalización que lo hacen compatible con cualquier identidad de marca: puedes incorporar logotipos, colores corporativos, fuentes y personajes animados adaptables. En resumen, no es solo una herramienta para hacer vídeos bonitos; es una forma rápida e inteligente de contar historias en un formato que engancha y se entiende, sin tener que aprender edición de vídeo ni pasar por un proceso técnico engorroso.


